Cortina apuesta por las “empresas éticas” para construir una “buena sociedad”
La directora de la Fundación ÉTNOR, Adela Cortina, ofreció una lección magistral sobre la ética en las empresas durante el desayuno de trabajo que mantuvo este viernes, 23 de enero, con el sector empresarial de la provincia de Valencia en las instalaciones de Fomento. En el encuentro estuvieron presentes Rafael Juan, presidente de la Federación de Asociaciones de Empresarios de la Safor (FAES), y el presidente del CEV, Salvador Navarro; entre muchos otros empresarios destacados.
Cortina empezó su discurso contando la historia de la Fundación ÉTNOR, “una historia nuestra en la que están todos los presentes invitados a participar, porque la ética nos importa a todos”. En este sentido, la catedrática pidió a los asistentes que participaran de este relato que es la ética aplicada al mundo de las empresas y las organizaciones, porque en la actualidad “el papel de la sociedad civil es vital”. El reto para ÉTNOR, “y para todos nosotros es que la sociedad civil tome cartas en estos asuntos de suma importancia”.
Según recalcó Cortina, la ética es rentable para la empresa si uno entiende bien lo que es la ética, porque argumenta que »en el seno de la empresa debe haber un clima ético que tenga en cuenta los valores de la empresa en la toma de decisiones. Es más inteligente buscar el acuerdo antes que el desacuerdo, es mejor cooperar. Las empresas tienen que tener una meta con la que los demás estén de acuerdo y se convierta en un bien público».
Por su parte, el presidente de la Fundación ÉTNOR, Francisco Pons, destacó la misión de la entidad, que tal y como argumentó, se fundamenta en promover el reconocimiento, la difusión y el respeto de los valores éticos. Pons incidió en la sencillez de la ética y aseguró que hacen falta filósofos para marcar un camino a seguir, que las empresas han de ser éticas a fin de lograr una sociedad más rica y más justa. Según el presidente de la Fundación, el empresario es importante en estos momentos porque crea trabajo y riqueza, forma a sus empleados e incorpora nuevas tecnologías para poder competir.
Francisco advirtió que hay que dejar de lamentarse, puesto que así se gana muy poco; »ahora las cosas están difíciles pero nunca antes han habido tantas posibilidades como hasta hora, solo que hay más competidores», y añadió que »tenemos la responsabilidad de trabajar en compañía de los políticos para que ellos creen infraestructuras adecuadas a la ciudad para poder competir». El presidente distingue dos tareas en los empresarios: trabajar con su mercantil y con las autoridades regionales y estatales, entre otras; a fin de que ayuden a desarrollar las empresas.